El hombre que había mostrado sus virtu-des como marino y funcionario guardaba dentro suyo una inquietud que lo devora- ba: hacer periodismo en el mas alto nivel. El 26 de Noviembre de 1958 salió a la calle bajo su dirección el periódico Correo de la Tarde, editorial impreso en los talle-res Haynes con 32 páginas de abundante y variada información. Manrique había na-cido periodista en mitad de su vida, no daba por perdido lo vivido: daba por ga-nado lo que habría de vivir en la impre-visible bifurcación de su destino. Desde este nuevo y vital sesgo de su personali-dad, Manrique mantuvo erguidas las primordiales facetas de su individualidad: su frontalidad, su coraje, su condición éti-ca. Un recuerdo ejemplifica estos valores: la tentativa de soborno que se llevó a su despacho de la dirección del diario para que éste silenciara graves denuncias so-bre irregularidades en una dependencia oficial. “Correo de la Tarde” atravesaba en esos momentos una difícil situación eco- nómica que se podría haber solucionado largamente con el monto de lo ofrecido. “Paco” hizo documentar el hecho con testi-gos y fotógrafos y ese día “Correo” apare-cía con un gran título en su primera página “¡Soborno!”, Y los detalles de episodio. El diario agotó su edición.
Después de atravesar difíciles avatares económicos y políticos, que afectaron la marcha del diario, entre ellos una cam-paña oficial destinada a privarlo de los avi-sos publicitarios que necesitaba para man-tener su diaria presencia, Correo de la

Tarde dio paso en 1963 a la revista sema-nal “Leer para Creer”. En 1965 aparece “Correo de la Semana”, un semanario que en poco tiempo adquiere justa fama por su campaña en defensa de los jubilados. Es prácticamente una publicación de carácter social que perdura hasta que en 1970 es designado Ministro de Bienestar Social.
Paralelamente, Manrique desarrolló una intensa actividad televisiva, la audición “Su-mario a Nuestro Tiempo”, emitida una vez por semana entre los años 1963 y 1969 por los canales 9, 11 y 13 registra su pro-funda preocupación por lo problemas del país. Lo mismo se puede decir de “Comen-tario Político”, emitido por canal 11 una vez por semana durante los años 1965 y 1966 y por el canal 13 todos los días en los pe-ríodos 1964, 1965 y de 1967 a 1969, hasta que finalmente es sacado del aire en 1969

por orden del ministro del interior del Gene-ral Onganía, Dr. Borda, porque sus comen-tarios no complacían al gobierno. Además de haber sido un asiduo comentarista en medios de prensa extranjeros, la actividad periodística de Manrique no se agota con lo expuesto, ya que en el año 1974 funda la

revista “Respuesta Argentina”, en la que ha-ce un examen profundo de toda la proble-mática argentina. Aproximadamente un año después deja de salir, cuando hace su rea-parición el periódico semanal “Correo de la Semana”, que es un verdadero órgano de combate en una época turbulenta de nuestra historia, se publica hasta principios de 1981 en que comienza a salir la revista “Correo de la Tarde”, la que continuará apareciendo hasta su muerte en 1988.
A finales de 1985 y durante todo 1986, Manrique protagoniza una columna política de gran repercusión en Nuevediario, el noti-ciero más visto de la televisión argentina que se emitía todos los mediodías por canal 9. Desde allí continúa con su lúcida interpreta-ción de la realidad política y social, desde un estilo aguerrido y frontal.